La Corte de Apelaciones de La Serena acogió un recurso de protección presentado por la madre de un estudiante con Trastorno del Espectro Autista (TEA), ordenando al Colegio Adventista coordinarse de manera permanente con los profesionales de salud que atienden al joven.
El fallo, emitido de forma unánime por la Primera Sala del tribunal, concluyó que el establecimiento actuó de forma arbitraria al no mantener comunicación ni trabajo conjunto con los especialistas externos, afectando así los derechos del estudiante.
La resolución se fundamenta en la Ley 21.545, que promueve la inclusión de personas con TEA, y en el Decreto 170 del Ministerio de Educación, que establece que las adecuaciones curriculares deben realizarse con participación de profesionales del colegio, la familia y especialistas externos.
Aunque el colegio argumentó falta de recursos, el tribunal descartó que ello justifique la falta de coordinación, y recalcó la obligación del establecimiento de garantizar una educación inclusiva y respetuosa del desarrollo integral de sus estudiantes.
Además, la Corte ordenó reforzar acciones de sensibilización dirigidas a alumnos y apoderados, y capacitaciones para docentes, con el fin de mejorar la comprensión sobre el TEA, especialmente considerando que el alumno se encuentra en una etapa adolescente, que puede presentar mayores desafíos conductuales si no se interviene adecuadamente.
En conclusión, el tribunal determinó que la falta de coordinación y apoyo integral afecta la vida y salud psíquica del estudiante, por lo que ordenó medidas concretas para fortalecer su inclusión y bienestar.
